Desastroso partido el vivido el pasado sábado en el Pepe Ruiz Vela ante un rival que, a pesar de su clasificación, supo jugarnos y de qué manera a nosotros. Ya el bajísimo tanteo del primer cuarto presagiaba que el partido iba a ser un auténtico suplicio y de hecho lo fue por dos razones: La primera, fue el peor partido de lo que llevamos de temporada y nos faltó concentración y segundo, porque nuestro rival, salvo en tapones donde ahí si estuvo Leo a su nivel por ejemplo, fue muchísimo mejor que nosotros y creyó en la victoria, sobre todo porque no tenían nada que perder y tocaba pasárselo bien.
En cuanto al cadete, aún teniendo a todo un miura como Cajasol, los chicos de Leopoldo salieron enchufados al partido y jugándole de tú a tú ante un Caja (o Banca Cívica, ya no sabemos como llamarlo) que lo pasó realmente mal y que llegó a perder de 6 puntos. Lo malo es que cuando estos cajistas ponen el turbo y se baja un pelín la intensidad, pues llega la derrota, 39-65, que aunque parezca clara es un resultado engañoso porque se vivió, sin duda uno de los mejores partidos que se recuerdan de nuestro equipo cadete. Así seguro que daremos algún susto en lo que queda de fase, más la siguiente.
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